Los tensores de carraca, también conocidos como tensores de trinquete o correas de amarre con carraca, son herramientas esenciales en la industria para asegurar, tensar y estabilizar cargas pesadas. 

Estos dispositivos se utilizan en diversas aplicaciones industriales y comerciales, principalmente para el transporte de mercancías y asegurar objetos durante su manipulación. 

Su funcionamiento simple, pero efectivo, ha hecho que los tensores de carraca sean una opción popular en sectores como la logística, la construcción y el transporte marítimo, entre otros.

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¿Qué son los tensores de carraca?

Un tensor de carraca es un dispositivo de sujeción compuesto por una correa o banda de alta resistencia y un mecanismo de trinquete (carraca). Este mecanismo permite ajustar y mantener la tensión en la correa de manera precisa y sin necesidad de un esfuerzo excesivo. Las correas suelen estar fabricadas de materiales sintéticos como el poliéster, que ofrece alta resistencia y durabilidad, incluso bajo condiciones extremas.

El mecanismo de trinquete es la pieza clave del dispositivo. Consiste en una rueda dentada y una palanca, que permiten bloquear la correa en una posición determinada y ajustar la tensión de manera incremental. Esta característica asegura que la carga esté firmemente sujeta sin riesgo de deslizamiento o desplazamiento durante su transporte o manipulación.

Componentes de un tensor de carraca

  1. Correa o banda: La correa está hecha de materiales resistentes y duraderos, generalmente poliéster, con capacidad para soportar cargas pesadas sin estirarse o romperse.
  2. Carraca o trinquete: Este es el mecanismo de bloqueo y ajuste, que permite mantener la tensión adecuada en la correa.
  3. Ganchos o anclajes: Los tensores de carraca suelen incluir ganchos en ambos extremos, que permiten sujetar la correa a un punto fijo, como un camión o una estructura.