El poliéster, un material sintético de gran versatilidad, ha revolucionado la industria de los útiles de elevación al ofrecer una combinación única de resistencia, durabilidad y flexibilidad.
Desde eslingas hasta correas de amarre, el poliéster se ha convertido en una opción preferida para una variedad de aplicaciones en la industria de la elevación de cargas.
Por ello, en este artículo de Bezabala, exploraremos el uso del poliéster en los útiles de elevación y sus beneficios para la seguridad y eficiencia en el trabajo.
Eslingas de poliéster
Las eslingas de poliéster son uno de los útiles de elevación más comunes en la industria. Estas eslingas están hechas de fibras de poliéster tejidas o trenzadas, lo que les confiere una resistencia excepcional a la tracción y una gran capacidad para soportar cargas pesadas.
Además, el poliéster es resistente a la abrasión, a los productos químicos y a la radiación ultravioleta, lo que lo convierte en una opción ideal para entornos industriales exigentes.
Beneficios de las eslingas de poliéster
- Ligereza: Las eslingas de poliéster son mucho más ligeras que las eslingas de acero, lo que las hace más fáciles de manejar y transportar.
- Flexibilidad: El poliéster es un material flexible que se adapta fácilmente a la forma de la carga, lo que facilita su manipulación y asegura una distribución uniforme de la carga.
- No conductividad: A diferencia del acero, el poliéster no es conductor de electricidad, lo que lo hace seguro para su uso en entornos eléctricamente sensibles.
- Resistencia a la corrosión: A diferencia del acero, el poliéster no se oxida ni se corroe, lo que garantiza una vida útil más larga y una mayor resistencia a la intemperie.
- Compatibilidad con cargas sensibles: Las eslingas de poliéster son suaves al tacto y no rayan ni dañan la superficie de la carga, lo que las hace ideales para levantar cargas sensibles.