Tal y como vimos la semana pasada, la oscilación ocurre al utilizar un sistema personal de detención de caídas, como un arnés de seguridad, que no está anclado directamente sobre la cabeza. Si ocurre una caída, oscilarías como un péndulo, hacia atrás hasta el punto de sujeción.
Por ello, hoy desde Bezabala os damos algunos consejos para evitar la oscilación.
¿Cómo evitar la oscilación?
La única forma de evitar la oscilación es permanecer a cierta distancia del punto de sujeción. Cuando la cuerda está por encima de la cabeza puede evitar la oscilación al permanecer dentro de 30° del punto de sujeción. Mientras más lejos te encuentres de ese punto, más oscilarás y más duro te golpearás contra la estructura.
Lamentablemente, no existen recomendaciones generales sobre cómo mantenerse dentro de los 30° de zona segura. En algunos casos, la tecnología disponible puede ser de ayuda. Por ejemplo, cuando el punto de sujeción es una viga en I en paralelo al extremo, podrías utilizar una abrazadera que ruede a lo largo de la viga a medida que te mueves. Sin embargo, este es un escenario muy específico.
Las líneas de vida funcionan con el mismo propósito, pero cuando la sujeción es estática necesitas otra opción. Con frecuencia, el punto de sujeción tiene que cambiar de ubicación, por lo que marcar la zona segura (en especial en construcción) puede ser poco práctico.
Para reducir el peligro es muy importante que todos los trabajadores realicen un curso específico para discutir los peligros de los trabajos en altura. La oscilación solo puede ser evitada cuando el trabajador sabe de qué se trata.